Educación Infantil obrigatoria. Menos desigualdade social
A partir del análisis realizado, el trabajo realiza dos recomendaciones de política educativa:
1) Extender la oferta de plazas en el primer ciclo de educación infantil, sobre todo a las familias económicamente más desfavorecidas, con el fin de mejorar el rendimiento educativo futuro de los alumnos, sobre todo en la competencia de comunicación lingüística y en la matemática, pues se demuestra que esta inversión educativa mantiene su efecto, al menos, durante los primeros cuatro años de la educación primaria.
2) Establecer una estrategia y programas de apoyo específico para el alumnado que inicia la educación obligatoria (educación primaria) que no haya sido escolarizado antes de los 3 años, así como para aquellos alumnos más jóvenes dentro de su cohorte de edad.