Importancia de la lectura
Según explica Atwell en su web,
todo se basa en la pasión por la lectura y el autoaprendizaje del niño. De
hecho, sus alumnos de séptimo y octavo grado leen más de 40 libros al
año.
La clave es permitir que el
niño elija los libros que quiere leer y los temas sobre los que quiere escribir.
“Cada año, mis alumnos de séptimo y octavo grado eligen y leen entre 40 y 100
títulos. Devoran los libros porque la biblioteca de la clase está llena
de historias interesantes de escritores serios, porque tienen
tiempo para leer en el colegio, porque esperan poder leer cada noche
en su casa y porque 35 años de experiencia me han enseñado que mi trabajo es
leer, disfrutar y recomendar literatura para jóvenes a los jóvenes a los que
enseño”, explicaba la propia Nancie en un artículo que publicó en 2010.
Las salas de lectura de su
colegio, sin embargo, no se parecen a las bibliotecas tradicionales. En muchas
ocasiones la lectura se hace en voz alta y luego los
profesores o los propios explican lo que leen y las palabras
desconocidas.
Apuesta por el
autoaprendizaje
Además, las clases no son
magistrales, sino que en cada asignatura los estudiantes hacen grupos
de investigación y deciden qué temas desarrollar con más
profundidad en cada asignatura, incluso en materias como matemáticas. Tras
concluir el proyecto lo exponen ante todo su curso. En este colegio no hay
exámenes estandarizados y la nota depende de la implicación de los alumnos.
Por otro lado, la práctica
es esencial: se hacen excursiones, mensualmente hay coloquios con expertos
invitados, se elabora una revista literaria todas las semanas, se realizan
numerosos experimentos, talleres de escritura y colaboraciones con organismos e
instituciones ambientales regionales.
Prácticas sociales
obligatorias
También se imparten varias
horas de música, deporte, arte dramático y estudios multiculturales a la semana,
y hay reuniones todas las mañanas en las que participa el colegio al completo
en las se debaten temas de actualidad, se leen poesías, se celebren cumpleaños.
Por último es obligatorio
realizar trabajos comunitarios, especialmente en el refugio de animales del
condado de Lincoln.
La clave, explica Atwell, son las clases
pequeñas, de 18 personas como máximo en un colegio de 75
alumnos, decoradas con obras de arte clásicas y de artistas contemporáneos
locales para fomentar la creatividad.
“Estoy convencida de que la
enseñanza es una de las grandes carreras: exige tiempo y energía, pero está
llena de significado, vale la pena y es interesante. (...) ¿Qué trabajo podría
ser más satisfactorio?”, concluye Nancie.
Fonte: lainformacion.com